Viernes
27 de Noviembre del 2015
El
"Black Friday", evento anual que marca el inicio de las compras
navideñas en Estados Unidos, no llegó a despertar grandes expectativas el
viernes, ya que los descuentos de los minoristas no lograron atraer a grandes
multitudes a las tiendas y a los centros comerciales.
Las
acciones de grandes cadenas minoristas como Best Buy y Wal-Mart cerraron en
baja, mientras que las de Target, escogidas por un analista por su estrategia
de promoción, fue uno de los pocos valores del sector que terminó en Wall
Street con subidas.
Los
buscadores de ofertas hallaron relativamente poca competencia en comparación a
otros años. Algunos ya habían comprado el jueves, un reflejo de la nueva
tendencia de las tiendas, que adelantan las ofertas al mismo Día de Acción de
Gracias sin esperar al siguiente, el tradicional "Black Friday".
Los
minoristas "quitaron sentido de urgencia a los consumidores al extender
sus promociones durante todo el año, y lo que vemos es resultado de esto",
dijo Jeff Simpson, director de prácticas minoristas de Deloitte.
Según
el analista, hubo poco movimiento en las tiendas el viernes, mientras que el
jueves el tráfico de compradores fue inferior a sus expectativas.
Hasta
un 20 por ciento de las compras navideñas de este año se harían durante el fin
de semana de Acción de Gracias, según las proyecciones de analistas.
La
Federación Nacional de Minoristas pronostica que las ventas crecerán un 3,7 por
ciento durante la actual temporada navideña, por debajo del 4,1 por ciento del
año pasado.
Pero
los cuatro días no son considerados un indicador fuerte para toda la temporada.
Un lento inicio el año pasado generó mejores promociones y un alza final de las
compras en los diez últimos días de diciembre.
La
tienda de Macy's en el centro comercial de Water Tower Place recibió a pequeñas
multitudes en las primeras horas de la lluviosa mañana de viernes en Chicago.
Más tarde, un millar de manifestantes atestó la zona comercial de Magnificent
Mile.
Y
mientras que el "Black Friday" muestra síntomas de estar perdiendo
fuerza en Estados Unidos, los compradores británicos parecen haberlo adoptado
de manera entusiasta, con reportes de multitudes ansiosas en grandes tiendas y
centros comerciales del Reino Unido.
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