Viernes
15 de Enero Del 2016
El índice
general de la Bolsa de Shanghái, el principal indicador de los parqués chinos,
cerró hoy con una caída de un 3,55 por ciento (106,68 puntos), en 2.900,97
puntos, en una nueva jornada de fuertes descensos, después de haber vivido
antes dos desplomes y otra importante caída en dos semanas.
El
referencial shanghainés, que hoy había abierto ya cayendo un 0,95 por ciento,
no pasó ni un solo minuto en positivo, y aunque sus pérdidas habían oscilado
con relativa moderación durante la mañana, se fueron intensificando durante la
sesión vespertina, habitualmente mucho más volátil en los a menudo inestables
mercados chinos.
En
el otro mercado de valores del país, la Bolsa de Shenzhen, el principal
indicador local cerró también con una caída de un 3,35 por ciento, en 9.997,92
puntos.
Tras
su inestable inicio de 2016, Shanghái parecía haber recuperado ayer cierta
estabilidad, después de cambiar de tendencia en las dos horas de sesión
vespertina y tornar sus pérdidas de la mañana en ganancias de un 1,97 por
ciento, aunque eso fue por la caza de gangas entre las fichas azules más
abaratadas estos días.
Al
efecto de esa búsqueda de oportunidades para invertir más a largo plazo de
parte de los inversores se sumó ayer el anuncio de que la nueva normativa que
hará que las nuevas ofertas públicas de valores (OPV) ya no dependan del
regulador sino de las propias bolsas se aplicará desde el 1 de marzo
paulatinamente y no de golpe.
Con
todo, hoy ambas bolsas regresaron a su tendencia bajista de las últimas
semanas, con lo que Shanghái cerró por segunda vez hoy desde 2014 por debajo de
la línea psicológica de los 3.000 puntos, señalada como límite de riesgo por
los analistas al inicio de la crisis financiera internacional de 2008.
No hay comentarios:
Publicar un comentario