Miércoles
9 de septiembre de 2015
China
fortalecerá su política fiscal, aumentará su gasto en infraestructura y
acelerará la reforma a su sistema tributario para apoyar a su economía, dijo el
Ministerio de Finanzas, pasos que se sumarán a otras medidas adoptadas por las
autoridades para revitalizar el crecimiento.
Los
funcionarios chinos han redoblado sus esfuerzos por revivir a una economía que
crece a su menor ritmo en década. Desde mediados de junio, las acciones que
cotizan en el país se han desplomado cerca de un 40 por ciento, lo que ha
generado turbulencia en los mercados financieros.
El
martes, datos mostraron que las importaciones de China cayeron respecto a
agosto, generando preocupaciones sobre la salud de la segunda mayor economía
mundial y su contribución al crecimiento global.
"Nosotros
aceleraremos la implementación y las mejoras de una política fiscal proactiva y
medidas relacionadas, haremos ajustes oportunos y agilizaremos las medidas de
reformas para apoyar un crecimiento estable y promover un desarrollo económico
saludable continuo", dijo el ministerio de Finanzas.
Departamentos
del Gobierno se han sumado a los esfuerzos de Pekín por apoyar a la economía.
La Comisión Nacional de Desarrollo y Reformas (NDRC, por sus siglas en inglés)
aprobó dos proyectos ferroviarios con un valor cercano a los 70.000 millones de
yuanes (11.000 millones de dólares), la más reciente medida por respaldar a
proyectos de infraestructura para impulsar el crecimiento.
El
Banco Popular de China, el banco central, también ha adoptado una serie de
medidas de flexibilización de su política monetaria desde fines del año pasado,
recortando sus tasas de interés y el encaje bancario en varias oportunidades.
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